El Renacer de Justin FIelds
Después de 1 año y medio en la NFL, la clase de quarterbacks 2021 no ha sido la más deslumbrante, al menos no después de las grandes expectativas que se tenía o aún se tienen sobre ellos. Aunque claro, todavía hay tiempo para permitirles un mejor desarrollo. Es poco válido recriminarles por demás la responsabilidad de los errores de sus respectivos equipos. Justin Fields es un ejemplo claro de ello. El egresado de Ohio State tuvo un 1er año complicado envuelto en el trabajo de un entrenador en jefe con características defensivas y que aprovechaba poco sus cualidades físicas, como lo es Matt Nagy. Su temporada 2022 sufrió un cambio radical al inicio de ella con un nuevo entrenador, Matt Eberflus. Durante el transcurso de este año, Fields ha ido creciendo considerablemente, esto debido al gran ajuste y diseño de jugadas basadas en su potencial físico. Chicago después de años buscando un quarterback franquicia, parece haberlo encontrado.
Foto de: Michael Reaves | Getty Images
Después de un 2021 en donde disputó 12 juegos siendo titular en 10 de ellos, Fields consiguió 1,870 yardas, 7 touchdowns por pase y 10 intercepciones. Por tierra, consiguió 420 yardas y 2 touchdowns. Pese a que comenzó la temporada como suplente, logró ganarse el puesto como titular y tener unos cuantos destellos a pesar de haber sido capturado en 36 ocasiones. Las dificultades fueron mayores a las que se pensaba y Fields obtuvo un récord de 2 victorias y 8 derrotas.
2022.
Con la llegada de Matt Eberflus al puesto de entrenador en jefe, las dudas surgieron en relación si era él quien podía sacarle el mayor provecho al potencial del jugador. Las primeras 4 semanas todo lucía peor que el 2021, pero no solo Fields, si no en general no había nada rescatable dentro del roster de Chicago. Mucho se comentó después de esas 4 semanas, sobre si el jugador de 2do año iba en camino a un año de mejora o si iba rumbo a ser un bust de la liga. Cabe aclarar que, bajo mi perspectiva, el margen para evaluar a un quarterback novato debe ser más amplio, sobre todo con la paciencia. Estamos malacostumbrados a creer que si, en general, un novato no tiene un impacto inmediato, es un mal jugador, o bien, no tiene potencial. También olvidamos el contexto al que llega cada uno de ellos, siempre será difícil brillar cuando tu equipo tiene uno de los 3 o 5 peores rosters de toda la liga. Todo implica desarrollo y basarse en un buen staff de coacheo con jugadas que aprovechen las principales cualidades de cada jugador.
Para aquellos que aún dudan sobre el cambio de Fields entre las primeras 4 semanas y las últimas 5, basta con revisar los números. De la semana 1 a la 4, tenía un rating de pasador de 58.7 y apenas completaba el 50% de sus pases, tanto así que Chicago promediaba 16 puntos. Con el pasar de las semanas, hemos visto un quarterback sumamente distinto, muy parecido a su última temporada jugando en la NCAA. A partir del partido frente a Minnesota donde cayeron 29-22, Fields promedia un rating de pasador de 100.44. A esto podemos añadir que por pase registra 851 yardas, 8 pases de touchdown, 2 intercepciones y ha sido capturado 16 veces. Por tierra, ha acarreado el balón para 455 yardas y 3 touchdowns. Esto es una clara muestra de cómo la elección de jugadas ha cambiado, se han dado cuenta en el staff que poner a lanzar 40 veces a Fields no era la vía para ganar los partidos. Incluso, era un quarterback que solo en el 6% de las jugadas salía de la bolsa de protección. Ahora el jugador tiene más libertad de romper jugadas, aprovechando su velocidad y movilidad, y también complementándolo con 2 buenos corredores, como lo son Montgomery y Herbert.
A día de hoy, Justin Fields es el quarterback que más sale de la bolsa evitando capturas en la NFL, promediando 6.4 “scrambles” desde la semana 5. Matt Eberflus ya amplió el diseño de jugadas, permitiéndole usar tanto sus piernas como su brazo. Otro punto donde el equipo ha cambiado y le ha permitido más comodidad a Fields son con los pases pantalla. En los primeros 4 juegos únicamente lanzó 6 pases pantalla, pero desde el partido frente a Minnesota, ha lanzado 20, completando 17 para 126 yardas y 1 touchdown. Lo sé, no son los mejores números, pero son pases que le han permitido tomar confianza y poniendo en menos riesgo el balón.
Si bien el deporte se basa en victorias y Chicago hoy mantiene un récord negativo (3-6), podemos decir que las victorias morales están llegando al equipo, aunque parezca poca cosa, pero vamos, hace 1 mes Chicago era para muchos, incluyéndome, uno de los 3 peores equipos de la NFL. Después de fracasar en su intento por hallar un quarterback franquicia, todo parece indicar que al fin lo han encontrado. A partir de ahora, lo que debe hacer Ryan Poles como gerente general es construir una base sobre su mariscal de campo, hay un par de piezas que tienen cierto potencial (Kmet, Mooney, Claypool, Johnson, Herbert, Jackson, entre otros) y que pueden ser la base de un buen proyecto. Si Chicago sigue potencializando al jugador y él mismo sigue aprendiendo y mejorando, podríamos hablar de un caso hipotético donde se convierta en un top 10 de la liga. Como ejemplos está el caso de Josh Allen y Jalen Hurts, 2 quarterbacks bien rodeados de talento y donde sus equipos han aprovechado y facilitado al máximo sus buenas cualidades físicas a lo largo de sus primeros años en la NFL. Disfrutemos el talento de Fields, los quarterbacks modernos solamente hacen más entretenida la liga y les brindan más opciones a sus equipos de ganar.
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