¿Qué ocurre con la ofensiva aéreade Baltimore?

Después de 8 semanas, Baltimore ha sido un equipo con bastantes altibajos. Mucho se le ha criticado al entrenador en jefe John Harbaugh, sobre todo por su pésima forma de cerrar los partidos, partidos donde en las 3 derrotas han llegado con una ventaja al último cuarto y lo han perdido. Aunque la parte del coacheo y el ajuste defensivo sean los principales culpables, la parte ofensiva también merece ser señalado. El ataque terrestre de Baltimore es dominante, podríamos decir que incluso es uno de los 3 mejores de la liga, pero el cuestionamiento llega en el ataque aéreo. Pese a que hoy Baltimore se encuentra como la ofensiva #10 de toda la liga, muchos seguimos sin convencernos que mediante este medio puedan crear un fuerte daño a equipos rivales.

Foto de: Nathan Ray Seebeck

Como les comento, cuando uno ve las estadísticas, puede decir que la ofensiva aérea de Baltimore lo ha hecho bien, y si, la mayor parte del tiempo han ejecutado de buena forma o al menos han cumplido. Hasta ahora, el equipo tiene 1,550 yardas, promediando 193.8 yardas por juego y 26 puntos por partido. Son números buenos y confiables, incluso Lamar Jackson ha demostrado que puede lanzar pases en el momento indicado del partido, cosa que se le criticaba mucho en años anteriores.

Por pase, los Ravens están rankeados en el puesto #25, teniendo 148 pases completos en 235 intentos a lo largo de 8 semanas, siendo este un 63% de efectividad, números que no dejan tan bien parados a la ofensiva de Greg Roman. No todo es malo, Lamar Jackson es el 8vo quarterback con mejor rating de pasador en toda la liga con un 94.2, solo detrás de jugadores como Patrick Mahomes, Josh Allen, Aaron Rodgers, Tua Tagovailoa, Geno Smith, Joe Burrow y Jalen Hurts. También por esta vía, han anotado 15 touchdowns, posicionándose como el 5to equipo que más ha anotado por pase de toda la liga.

Si la ofensiva aérea tiene números sólidos, ¿Cuál es el problema realmente en la ofensiva por pase del equipo?

Hablemos de los puntos negativos. Por cada intento de pase completo Baltimore promedia 7 yardas, pero por partido tienen en promedio 193.8 yardas, siendo el 8vo equipo que peor rendimiento tiene en esta área. Arriba mencioné la efectividad del equipo por pase, o al menos en zona roja, pero si dejamos a un lado este dato, Baltimore basa casi todo el partido en un ataque terrestre.

Mark Andrews es la opción principal cuando Lamar Jackson está lanzando, el ala cerrada cuenta 488 yardas, siendo líder del equipo. Devin Duvernay y Rashod Bateman son los 2 jugadores que, después de Andrews, tienen más yardas con 313 y 285 yardas respectivamente.

Foto de: Reuters

Analicemos un poco más a fondo los últimos partidos de Baltimore. En los primeros 3 partidos de temporada, promediaban 33 puntos. En los últimos 4 (sin contar el encuentro frente a Tampa Bay) su promedio bajó a 20.5 puntos. Basta con ver el juego frente a Cleveland en la semana 7, encuentro donde tuvieron solamente 254 yardas, siendo este su producción más baja en lo que va de la campaña. Lo que sorprende es que, previo a aquel partido la defensiva de Cleveland era la 5ta peor en puntos permitidos. En aquel encuentro, Lamar Jackson fue limitado a 9 pases completos en 16 intentos con solo 120 yardas, incluso Mark Andrews no registró ninguna recepción y pese haber corrido 160 yardas, promediaron 3.6 yardas por intento.

El colapso también se ha hecho notorio en la producción en zona roja. En los primeros 10 intentos de touchdown en esta zona, Baltimore salió avante en 8 de ellos. Posteriormente en las siguientes 18 visitas en zona roja, solamente pudieron completar en 8 en sus últimos 5 encuentros.

Lamar Jackson también es una prueba de cómo se ha ido cayendo el ataque aéreo. En los primeros 3 encuentros lanzó 10 pases de anotación, 2 intercepciones y promedió 249.7 yardas por pase. En las semanas siguientes el jugador tiene 5 pases de anotación y su promedio de yardas por pase ha caído de forma considerable.

Mucho de este bajo nivel se debe la ejecución que ha tenido la ofensiva en contra del blitz. Lamar Jackson ha declarado que el acomodamiento de los equipos rivales ha ocasionado que la ofensiva no tenga un ajuste tan efectivo como el del inicio de la temporada. Las defensivas rivales ahora le juegan a los Ravens con cover-0, pero poniendo a 5 defensivos a presionar a la línea ofensiva. Todo esto es responsabilidad del coordinador ofensivo Greg Rowman, quien en estos últimos partidos ha demostrado muy poca reacción en jugadas situacionales. En el último partido frente a Tampa Bay, la involucración de Isaiah Likely y Devin Duvernay fue mayor y ayudó bastante como válvula de escape al equipo cuando el ataque terrestre no lograba ser efectivo. Habrá que ver cómo se desarrolla la segunda mitad de la campaña.

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